Truquitos naturales (III): Aceite de ricino

Como muchos de vosotros sabréis, cada día soy más devota de la cosmética verde o natural. Me gusta investigar y probar remedios naturales. Uno de los productos naturales que más utilizo y me agrada son los aceites esenciales, en casa tengo una buena colección: de Romero, de Rosa Mosqueta, de Argán, de Almendras Dulces, de Espino Blanco a los que se unen el de Oliva y el de Girasol. Suelo combinarlos.

Uno de los que más estoy usando ahora es el de Ricino. Lo estoy usando para las pestañas. Antes utilizaba el de Almendras Dulces y Abeñúla pero, un día, me dió por probar este último. 


Me costó un poco encontarlo en Sueca. Al ser natural, pensé que sería fácil localizarlo en el Herbolario a donde voy pero no. Me dijeron que preguntase en la Farmacia. Pregunté en 3 y en la última tenían.


El Aceite de Ricino que estoy usando viene  en una botellita pequeña. No me acaba de convencer que tenga un orificio grande. Yo voy con cuidado cuando lo aplico pero corres el riesgo de que se caíga.

La textura que tiene es un poco más densa que la del Aceite de Almendras. Como éste tiene un color amarillo muy pálido.

Este aceite se extrae del Ricinus. Es un fruto tóxico por lo que antes de poder ser usado por el hombre debe pasar por una serie de procesos para eliminar cualquier riesgo para la salud.

                   (Este es el fruto del Ricinus. Yo juraría que mi vecina de El Mareny tiene en su jardín esta planta. Es bonita, tiene un aire muy navideño)

Los usos del Aceite de Ricino son varios. De muchos es conocido su utilización durante la Postguerra pero yo no le doy esta utilidad.

Es bueno para favorecer el crecimiento del cabello y fortalecerlo. Aún no lo he probado en el pelo, su uso va destinado a otra zona:

Mis Pestañas. No son como las de la imagen pero no puedo quejarme. Ya de por sí las tengo muy largas. Durante años las he mimado con Abeñúla y se nota. Pero, el Aceite de Ricino les está dando un cuidado extra. A mí me gusta mucho Abeñúla pero tiene componentes químicos, el Aceite de Ricino no, por eso lo prefiero.

Cada noche, me aplico un poco que previamente he calentado con las yemas de los dedos. Me paso el dedo índice por todas las pestañas y zona del párpado. No sólo estoy consiguiendo que mis pestañas estén cada día más bonitas sino que, el Aceite de Ricino, está difuminando las arruguitas del contorno de ojos y eliminando las posibles ojeras ya que ayuda a la piel a descansar.

Estoy más feliz que una perdíz con este tratamiento y ya es uno de mis básicos. No voy a renunciar a él.