De pelillos a la mar (I): Gliss Liso Asiático

Con el champú de Schwarzkopf "Liso Asiático" voy a iniciar una nueva sección dentro del blog dedicado a los productos capilares. Mi pelo es un poco especial, lo reconozco, es muy finito y lo tengo un poco demasiado débil. No es que se caíga sino más bien que se rompe cuando lo estoy lavando. Por ello, no ceso de tomar levadura de cerveza y pastillas contra la caída a parte de lavarlo con champús específicos como el de Klorane a la Qunina que, aunque me ha ido bien, noto que me reseca con exceso el pelo y aumenta mi problema añadido: el encrespamiento.

Yo soy una patosa para los cuidado capilares, lo reconozco, suelo plancharme el pelo pero nunca se me queda bien y al segundo ya lo tengo encrespado. Un poco hartita, la verdad sea dicha, me arriesgué el otro día a cambiar de champú. Este de Schwarzkof ya lo había visto muchas veces en las tiendas pero nunca lo había comprado, si que he probado el otro que tiene la marca, el Liso Seda que, aunque reconozco que a mí me fue bien, nada tiene que ver con el resultado que he conseguido usando este Liso Asiático.

A parte del champú, la línea se completa con el Bálsamo Acondicionador, la mascarilla y el serum. No los he probado. Por ahora, con el champú sólo me va bien.

Este champú se presenta en un envase transparente que contiene 300ml que cunden mucho. El champú tiene un tono lila muy atractivo y huele muy bien. Es un champú que hace mucha espuma con poca cantidad, una espuma muy suave y que limpia perfectamente tanto el cabello como el cuero cabelludo sin agredir y, lo que es importante: sin resecar. Toda esa sensación de aspereza que estaba notando últimamente con el de Klorane ( cosa que al principio no ocurría) no la siento con éste. La suavidad es extrema y se nota incluso sin usar acondicionador. Hoy no me lo he aplicado y no he tenido tirones y he notado que no se rompía tanto el pelo; de lo cuál me alegro.

Este champú está indicado para cabellos rebeldes con tendencia a encresparse. En el anuncio sale una chica con el pelo rizado a la que se le alisa como por arte de mágia. Es verdad, en mi caso, que el pelo lo deja más manejable y aparentemente liso. No lo deja liso liso como lo llevan las asiáticas pero si que se aprecia más uniforme al tiempo que facilita su planchado. Si me lo plancho el efecto liso se nota más, si no lo hago si se ve un pelo más en su sitio sin encrespamiento. Creo que para cabellos muy rizados no funciona, sólo en aquellos que ya son más lisos.

Según reza en el envase contiene extracto de bambú y de orquídea. El bambú repele la humedad, y eso es cierto pues también lo he comprobado en el serum con bambú que tengo de Avon.

Es un champú muy completo. No sólo mantiene a raya mi encrespamiento sino que, además, aporta esto a mi cabello:

- Repara y alisa su estructura: Lo de alisar lo afirmo, lo de reparar  aún no lo firmo porque imagino que será a largo plazo. Lo que sí que veo es que el pelo se muestra más sano. Igual ayuda a reforzar los efectos de las mascarillas de aceite de almendras y oliva.

- Aporta brillo: Sí y mucho. Aunque suelo añadir vinagre en el último aclarado, lo cierto es que este  champú aviva mucho el brillo del cabello y me agrada su resultado.

-Es para uso frecuente. No es agresivo con la fibra capilar sino todo lo contrario.

Yo lo compré en Schelecker de Sueca el otro día, su precio no llega a los 3 euros. Me parece un buen precio para la calidad que tiene el champú. Creo que de todos los que he probado de Schwarzkopf es el que más me gusta y el que mejor me está resultando.

No descarto comprarlo de nuevo. Noto como beneficia a mi pelo y como mantiene a freno el encrespamiento. Me gusta por lo que es altamente recomendable.